30 junio 2008
¡¡Spain is different!!
Ni la crisis económica, ni la guerra de Irak, ni la subida de impuestos... Ni siquiera la detención de media corporación municipal ni la Virgen del Carmen han conseguido sacar a tanta gente a las calles de Estepona como la selección española.
De la noche a la mañana hemos pasado de llamar facha al que lucía una bandera de España a competir por ver quién la tiene más grande (como suele pasar en otros ámbitos en este país).
Todo valía en la noche del 29 de junio para demostrar que eras más español que tu vecino. Los padres se olvidaban de la psicosis de las sillas adaptadas para los pequeños, de los airbag y de los cinturones de seguridad para sacar a sus hijos por las ventanillas de los coches enarbolando la insignia nacional.
Familias enteras se subieron al remolque de los camiones para recorrer el municipio al grito de "¡Viva España!" con las caras pintadas con los colores de la bandera y tarareando la inexistente letra de nuestro himno.
¡Qué momentazo! Más de uno seguro que tenía hasta los pelos del bigote de punta. A lo mejor en el PP se plantean incorporar a Luis Aragonés al nuevo equipo de gobierno de Rajoy. Al fin y al cabo, ha conseguido unir a toda España para ensalzar el orgullo patrio. Orgullo voluble, eso sí. En unos días hemos pasado de casi pedir la eutanasia para Luis Aragonés a ensalzarlo como la máxima autoridad nacional. Que si es un sabio, que si es el mejor...
Además, nos hemos olvidado de Raúl, de lo senil que estaba Aragonés, de que los jugadores no sienten los colores, de lo mal que nos caía nuestro vecino.... Todo eran abrazos de hermanamiento, muestras de cariño, charlas amigables con desconocidos...
Sin lugar a dudas, Spain is different
De la noche a la mañana hemos pasado de llamar facha al que lucía una bandera de España a competir por ver quién la tiene más grande (como suele pasar en otros ámbitos en este país).
Todo valía en la noche del 29 de junio para demostrar que eras más español que tu vecino. Los padres se olvidaban de la psicosis de las sillas adaptadas para los pequeños, de los airbag y de los cinturones de seguridad para sacar a sus hijos por las ventanillas de los coches enarbolando la insignia nacional.
Familias enteras se subieron al remolque de los camiones para recorrer el municipio al grito de "¡Viva España!" con las caras pintadas con los colores de la bandera y tarareando la inexistente letra de nuestro himno.
¡Qué momentazo! Más de uno seguro que tenía hasta los pelos del bigote de punta. A lo mejor en el PP se plantean incorporar a Luis Aragonés al nuevo equipo de gobierno de Rajoy. Al fin y al cabo, ha conseguido unir a toda España para ensalzar el orgullo patrio. Orgullo voluble, eso sí. En unos días hemos pasado de casi pedir la eutanasia para Luis Aragonés a ensalzarlo como la máxima autoridad nacional. Que si es un sabio, que si es el mejor...
Además, nos hemos olvidado de Raúl, de lo senil que estaba Aragonés, de que los jugadores no sienten los colores, de lo mal que nos caía nuestro vecino.... Todo eran abrazos de hermanamiento, muestras de cariño, charlas amigables con desconocidos...
Sin lugar a dudas, Spain is different